Sí, así es veintiunico lector; el Estado de Puebla se pintará tricolor, y no precisamente por algun triunfo, hoy por hoy remoto, de la selección nacional de futból, sino por los probables resultados contundentes que obtendrá el Partido Revolucionario Institucional a lo largo y ancho del Estado.
Pero ¿qué va a ganar?, primenramente la mayoria de los Distritos Federales Electorales, cediendo, por negociación o por estrategia, solo un par o máximo tres, de estos distritos a Acción Nacional, todo para demostrar "la imparable Democracia que crece con nosotros", diría el Instituto Federal Electoral. Pero tambien gana la admiración de quienes pensaron que despues del problema Cacho-Marín el PRI poblano se hundiría, y para sorpresa de todos, las elecciones intermedias locales y las que se avecinan demuestran el poder de una maquinaria partidista y estatal imparable.
Todo esto sucederá ante los ojos de un Acción Nacional dividido que no ha demostrado ser un partido de opocición real, asaltado precisamente por expriistas, que lo secuestran como un activo político propiedad de aspiraciones Moreno Vallistas, pero tambien bajo una dirigencia que no a medidado entre grupos extremistas de derecha y los grupos tradicionales de este Partido. Para ejemplo, la renuncia de varios precandidatos por la via plurinominal, provocada por un personaje que le resulta cómodo negociar con los grupos enfrentados de un partido que no ha demoistrado para nada alejarce de las arcaicas tradiciones priistas.
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